El redescubrimiento de la luna
Ojos de luna llena, gigantescos espejos. No podría creer que tengo la posibilidad de ver mi rostro entero en ellos aunque sea por accidente. Tan grandes esos faros, pero mirando al infierno como temerosa. La mirada baja te guía en tu caminar dudoso, no te preocupes, no caeras, el piso esta muy cerca y te abrazaria con menos violencia que a los demás. Ahí vas, mirando hacia abajo, y yo me pregunto ¿Por que? ¿Que buscas con tanta ansia en el suelo? ¿Los demonios que enterraste? No te preocupes, eres fuerte y no saldrán de donde los dejaste.
No sonríes, ni aunque suene la canción más alegre, seguro muchos le han escrito a algo tan poco común como tu sonrisa. Simetría, pureza, contraste entre el rojo y blanco. Ni la sangre de nuestro peor enemigo en la nieve se vería con más viveza que el rojo con el que has bordeado tu boca. Hoy hace frío y exhalas esencia que se pierde en el aire. Susurrale tus versos, dale tus canciones a ese vapor que se hará uno mismo con el aire que muchos respiraremos hoy, danos tu magia, danos la solución de resolver la apatía matinal, sonrienos, aunque no sepamos como contestar la magia, aunque sólo nos maravillemos por tal marca eterna en nuestro cofre de recuerdos a corto plazo.
Viajes de un lugar a otro en tu día, aun no vas de alla para conmigo, decenas de personas te notan, aunque un par de audífonos tengas para aislarlos, ellos te seguirán viendo, notando como existes y como defiendes el concepto del orden y silencio dentro del caos. Todos ven como eres luz de escenario para un novato en su debut, impresionantemente avasalladora que podría quebrarle la concentración, o que podría ponerlo justo en el lugar que necesita para nacer.
Hoy no seas cuidadosa de donde pisas, mira hacia el frente, tropezate conmigo, tirame tu expresso doble encima aunque eso signifique que tardes más en despertar. Fumame los días y calma esa ansiedad, abre bien los ojos y mira de frente, que ahí estoy, cerca, más cerca de lo que has imaginado.
Sonrieme y confundeme el día, ponme nervioso, demuestrame que no lo se todo y hazme ver que ninguno de los dos planeó que así sería nuestro día por la mañana, que ninguno planeó que está mañana marcaría el inicio de la ruta de un satélite más alrededor de ti.
No sonríes, ni aunque suene la canción más alegre, seguro muchos le han escrito a algo tan poco común como tu sonrisa. Simetría, pureza, contraste entre el rojo y blanco. Ni la sangre de nuestro peor enemigo en la nieve se vería con más viveza que el rojo con el que has bordeado tu boca. Hoy hace frío y exhalas esencia que se pierde en el aire. Susurrale tus versos, dale tus canciones a ese vapor que se hará uno mismo con el aire que muchos respiraremos hoy, danos tu magia, danos la solución de resolver la apatía matinal, sonrienos, aunque no sepamos como contestar la magia, aunque sólo nos maravillemos por tal marca eterna en nuestro cofre de recuerdos a corto plazo.
Viajes de un lugar a otro en tu día, aun no vas de alla para conmigo, decenas de personas te notan, aunque un par de audífonos tengas para aislarlos, ellos te seguirán viendo, notando como existes y como defiendes el concepto del orden y silencio dentro del caos. Todos ven como eres luz de escenario para un novato en su debut, impresionantemente avasalladora que podría quebrarle la concentración, o que podría ponerlo justo en el lugar que necesita para nacer.
Hoy no seas cuidadosa de donde pisas, mira hacia el frente, tropezate conmigo, tirame tu expresso doble encima aunque eso signifique que tardes más en despertar. Fumame los días y calma esa ansiedad, abre bien los ojos y mira de frente, que ahí estoy, cerca, más cerca de lo que has imaginado.
Sonrieme y confundeme el día, ponme nervioso, demuestrame que no lo se todo y hazme ver que ninguno de los dos planeó que así sería nuestro día por la mañana, que ninguno planeó que está mañana marcaría el inicio de la ruta de un satélite más alrededor de ti.
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