Tradiciones nuevas

Uno aprende a dejar de querer cambiar los focos fundidos, aprende a abrazar la poca luz que puede aprovechar. No necesitan tantas fuentes de luz para moverse, he aprendido a no chocar con los obstáculos, he aprendido los caminos por los que me muevo y caigo pocas veces, caídas en las que duele más el orgullo por fallar que el golpe en si mismo.

Hay cosas que uno se acostumbra a hacer por si mismo, desde vivir, respirar, comer, etc. Cosas que te hacen dejar de depender de cosas básicas. No digo que sea malo depender, pero es bueno que nosotros decidamos de que si y de que no dependemos. No dependo de alguien para conocer un bar nuevo, No dependo de nadie para ver una película que ansío ver. Sin sorpresas, sin expectativas.

Sin caer en el hedonismo totalmente, encuentro que en los últimos años me rompí varios lazos de dependencia y aprendí a forjarme maneras de entender como me podía hacer feliz e incluso darme placer en la vida. Gula, avaricia y pereza. 3 de 7, no necesito más por ahora.

En silencio y sin gritarlo, supliendo carencias y tapando huecos. El placer y felicidad esta en nuestras manos y resulta tremendamente adictivo dejar de buscar lo que esta en manos propias, aunque lo que nos ofrezcamos a nosotros mismos nunca sea suficiente.

Comentarios

Entradas populares