Atras

Cuervos vuelan sobre mi planeando como repartiran su festin, la amenaza aparentemente no es peligrosa solo es una simple petición que emerge del lado oscuro de mi duermiente alma. Sentado frente al pozo de los deseos, observo que por moneda tirada se anhela en voz alta un sueño, en mi el problema estuvo en tirar los deseos y sueños al pozo por una recompensa a cambio, deseos que deseche y quiza alguien mas los este obteniendo. Las palabras suicidan, pero nunca me he visto forzado a pensarlas, sin embargo, todos las usan para matar, todos tiran palabras como piedras al rio. Por mi rio ya no hay agua solo piedras.

Solo la noche y el silencio saben mi verdad, solo ellos han escuchado las palabras que no digo, solo me escuchan pero no responden, solo comprenden, desaparecen un momento y vuelven al dia siguiente de la mano. Es inevitable dejar de buscar lo que no se tiene, es inevitable no valorar lo que se tiene, siempre buscamos lo que vemos lejos para poder perder mas facilmente lo que tenemos cerca.

Nadie, sin, nada, ninguna y excepto se han convertido en las palabras mas usuales de mi vocabulario interno, y se convertiran en las palabras mas pronunciadas pero jamas gritadas, solo  yo podre conocerlas y explorarlas hasta el fin en todos sus significados posibles.

La vida pasa frente a mi vista, pero no me escucha, la vida es autista. No hay oportunidad de revancha, esa palabra no existe para mi, pues la venganza o revancha no hace desaparecer los recuerdos del pasado solo lo cubren con un manto lleno de agujeros por donde se escapa el dolor y el remordimiento.